domingo, noviembre 09, 2008

HOMENAJE A DESSALINES A 250 AÑOS DE SU NATALICIO

La Habana, 26 oct 2008.- “Haití ante sus desafíos, a los 250 años del nacimiento de Jean Jacques Dessalines” es el enunciado de la convocatoria efectuada por integrantes de la comunidad de haitianos y sus descendientes en provincia de Ciudad de la Habana para homenajear al patriota caribeño.

Lo anterior fue dado a conocer este sábado en la Casa de la Cultura del Cotorro durante la celebración del Día Internacional del Creole, que contó con la asistencia del doctor Jean Maxius Bernard, Consejero y Encargado de asuntos culturales de la Embajada de Haití en Cuba.

Jean Jacques Dessalines nació en Guinea el 20 de septiembre de 1758, capturado en su juventud y llevado a Haití como esclavo. Participó no sólo en la rebelión desarrollada desde 1791 contra el dominio esclavista sino que se convirtió en una de las principales figura de la Revolución haitiana.

La jornada de tributo al fundador de la patria haitiana se extenderá hasta el 17 de octubre del 2009, aniversario del asesinato de este líder en el 1806, y se proponen un conjunto de acciones reflexivas y culturales a organizaciones, entidades estatales, personalidades, estudiantes y otros componentes de la sociedad cubana.

El doctor Bernard expuso sobre el rol de Jean Jacques Dessalines en la Revolución haitiana y la significación de su personalidad en la historia de ese país y del llamado Nuevo Mundo.
CONVOCAN A CONMEMORAR EN CUBA LOS 250 AÑOS DEL
NATALICIO DEL GENERALISIMO JEAN JACQUES DESSALINES



REPUBLICA DE CUBA

COMITÉ DE LOS 250 AÑOS DEL NATALICIO DEL
GENERALISIMO JEAN JACQUES DESSALINES

CONVOCATORIA

TEMA: HAITI ANTE SUS DESAFIOS A LOS 250 ANOS
DEL NATALICIO DE JEAN JACQUES DESSALINES

Bajo la idea de "Haití ante sus desafíos, a los 250 años del natalicio de Jean Jacques Dessalines", ocurrido en Guinea el 20 de septiembre del 1758, se convoca a organizaciones, entidades estatales, personalidades, estudiantes y otros componentes de la sociedad a rendir tributo al fundador de la patria haitiana.

El intercambio teórico sobre Jean Jacques Dessalines permitirá establecer su rol en la revolución haitiana y la significación de su personalidad en la historia de este país y del Nuevo Mundo.

Líder de la Revolución haitiana, proclamó la independencia del país el primero de enero de 1804.

Este aniversario constituye una especial ocasión para reflexionar, fijar conceptos, proyectos y acciones con motivo de la situación actual de Haití en pro del desarrollo económico y social para todos los haitianos.

Igualmente, para intercambiar sobre el aumento, integralidad y permanencia de la cooperación en todos los ámbitos con esa nación.

La conmemoración abarcará el período del 25 de octubre de 2008 hasta el 17 de octubre del 2009, fecha en que se conmemora la muerte de Jean Jacques Dessalines en 1806.

El conjunto de acciones a desplegar en esta jornada comprende paneles, mesas redondas, coloquios, conferencias, talleres, exposiciones, concursos en las más variadas formas de intercambios teóricos.

También, publicaciones, presentaciones de documentales, divulgación de las actividades nacionales e internacionales vinculadas a Jean Jacques Dessalines y a Haití.

Un aspecto muy importante de este homenaje lo constituirá la reafirmación de los potenciales aportes de toda naturaleza de la comunidad de haitianos y sus descendientes residentes en Cuba, de los estudiantes haitianos radicados en el país y de los demás componentes de la sociedad cubana en apoyo a los desafíos que enfrenta el pueblo haitiano.

Los interesados en participar en la jornada deberán comunicarse directamente con el COMITÉ DE LOS 250 AÑOS DEL NATALICIO DEL GENERALISIMO JEAN JACQUES DESSALINES.

En La Habana:

Gonzalo Artido Consuelo Doris Díaz Raimundo Gomez
Telf. (537) 832 4101 Tel: (537) 881-3506 Telf. (537) 832-6901
e-mail : ray@ain.cu

Cotorro, 25 de octubre del 2008

martes, septiembre 23, 2008

VOLVEREMOS A DECIRNOS ADIÓS...TITINA

LATINAMERICALANDYA
http://latinamericalandya.blogspot.com/2008/09/volveremos-decirnos-adistitina.html
22-9-2008

Por Julio Mitjans desde la Habana

Luego de dos huracanes, cuando los rayos de la solidaridad iluminaban nuestras vidas, y nos disponíamos a sonreír otra vez, en las Tunas moría la reina del Gagá, Silvia Hilmo Sandi, reconocida como Mambó Mayor, la jerarquía más alta de la religión Vodú en Cuba, pero aún no he dicho todo, aún no me atrevo a escribir Titina.

A veces uno dice nombres y evoca, sueños, luchas, alegrías, tristezas, vidas que soportan la fe y la memoria de una familia de una comunidad o de un país, eso es Titina, en ella palpitaban esencias que el dieron a nuestra nación un rostro, un aire, un ademán irrepetible. Allí desde la Cuba profunda en el batey del central azucarero, esta mujer no dejó en el olvido las tradiciones de sus ancestros.

El Vodú, sus conjuros mágicos sirvieron para reunir a su alrededor al pueblo, que siempre busca un amparo espiritual, que en el devenir de Titina fue algo más que un sistema mágico religioso, no quisiera hablar de legado, pues cada uno de nosotros vive en la obra que ha hecho, y Petit Dance ha sido el camino que Titina labró para todos nosotros a golpes de tambor, cantos, y pasos de baile, pudiéramos hablar de una sabiduría que nos hace más plenos, que nos devuelve lo que somos entre el polvo del batey y la plantación de caña.

Por ello los Ioa del Vodú reciben hoy 17 de septiembre una claridad mayor, seguros de que Volveremos a decirnos adiós, …Titina
SEMILLA DE HERENCIA DE LA CULTURA FRANCO HAITIANA EN CUBA

VISION TUNERA
http://www.visiontunera.icrt.cu/
19 de septiembre de 2008
Por Anybis Labarta García

A la edad de 82 años falleció en la oriental provincia de Las Tunas Silvia Hilmo Sandi, Titina, la directora del más emblemático grupo portador de la cultura francohaitiana en la región, llamado Petit Dancé. El pueblo acompañó en procesión a la patriarca del grupo hasta su última morada, el cementerio Vicente García, de la capital tunera.

Titina fue merecedora en vida de disímiles premios por su labor incansable en el rescate de expresiones como la música y la danza propias del patrimonio cultural francohaitiano, que forman parte de la identidad cubana desde hace muchos años, como fruto de la emigración haitiana a Cuba en la primera mitad del siglo XX.

Entre los lauros ganados por Titina figuran el Memoria Viva, que otorga el centro cultural Juan Marinello; el Premio Nacional de Cultura Comunitaria y el Internacional del Caribe, entregado a Titina en la Fiesta del Fuego por Abel Prieto Jiménez, ministro de Cultura.

Según Orlando Vergés, director de la Casa del Caribe, institución de Santiago de Cuba, Titina es una semilla de herencia de la cultura francohaitiana en todo el país por el trabajo tan profundo y serio de defensa de este patrimonio en varias generaciones y con ella se va gran parte de la información relacionada con ese legado a nuestra identidad.

Desde 1977 Titina, hija de haitianos emigrantes, formó el grupo Petit Dancé y en cuatro décadas sembró el amor a su cultura en sus descendientes. Un amor que se traduce en el compromiso de hijos, nietos y biznietos de preservar lo trasmitido por ella.

En la despedida del duelo el historiador de la ciudad de Las Tunas, Victor Marrero, enfatizó que Titina permenecerá por siempre en la memoria popular como ese ser que se entrego en cuerpo y alma al rescate de la autenticidad cultural.

lunes, septiembre 15, 2008


COMUNIDAD DE HAITIANOS Y SUS DESCENDIENTES EN CUBA AGRADECE EL MENSAJE DE RENE GONZALEZ SEHWERERT

Uno de los cinco cubanos antiterroristas presos injustamente en los Estados Unidos, hace exactamente diez años, (http://www.juventudrebelde.cu/cinco-heroes/) dirigió al pueblo cubano una misiva ante los estragos sufridos en Cuba tras el paso de la Tormenta Tropical Fay, primero, y de los huracanes Gustav e Ike, (http://www.cubanews.ain.cu/2008/acn_gallery_ike.htm) después, expresando el sentir suyo y de sus compatriotas prisioneros.

La comunidad de haitianos y sus descendientes en el país, inmersa en las tareas de recuperación al igual que el resto del país, agradece este emotivo gesto de René González Sehwerert, a la vez que le hace llegar su sentimiento solidario ante la monstruosa arbritariedad que se comete contra él y el resto de los cinco cubanos presos en los Estados Unidos de Norteamérica.

A continuación, reproducimos el mensaje enviado por René al pueblo cubano:

Ustedes curarán esas descomunales cicatrices

13 de septiembre de 2008 01:48:58 GMT

3 de septiembre de 2008.
«Año 50 de la Revolución».

Hermanas y hermanos de la Isla y de Pinar:

Con el corazón apretado hemos ido accediendo paulatinamente a los detalles del desastre que asoló sus pueblos y hogares. Duele hondo ver destruido el resultado del trabajo de generaciones, y a la impotencia por la injuria personal de los últimos diez años se suma la de tener que vivir desde aquí el desgarrador drama que hoy sufren ustedes. Es duro poder enviarles solo palabras cuando daríamos cualquier cosa por estar físicamente allí ayudando, reconstruyendo, alentando, trabajando, luchando; los cinco junto a ustedes.

Los esperan todavía durísimos retos, que pondrán a prueba el espíritu solidario, la conciencia y la cohesión social sembradas en ustedes por la Revolución. Pasarán meses en los que algunos problemas persistirán, y habrán de enfrentar la tentación del individualismo y del desaliento, algo lejanos ya estos instantes del primer impulso. Solo un fuerte espíritu comunitario les permitirá vencer esta descomunal batalla.

Confío en la nobleza, en la voluntad y en el carácter colectivo de ustedes. Guardo en un rincón privilegiado de mis memorias a mis hermanos de misión internacionalista, a los dedicados profesores y trabajadores de la escuela de aviación, a los entusiastas y disciplinados paracaidistas pineros. Siempre fue un gozo volar sobre Pinar del Río o sobre la Isla, andar entre sus gentes y sentirme como en casa, o hasta enfrentar algún ciclón juntos. Confío en ese espíritu generoso y corajudo del que he sido excepcional testigo.

Ustedes curarán esas descomunales cicatrices, y la Isla y Pinar volverán a ser ese milagro de naturaleza geográfica y humana, tan digno de ser admirado desde un avión como de ser compartido con su gente.

En nombre de los cinco, quienes les hemos recibido tanto, llégueles un fuerte abrazo.

René González Sehwerert

domingo, junio 15, 2008

LA COMUNIDAD HAITIANA EN LA SEMANA DE LA CULTURA EN SANTA CRUZ DEL SUR


Del 16 al 23 de marzo del 2008 se celebró la Semana de la Cultura de Santa Cruz, del Sur, provincia de Camaguey, al oriente de Cuba.

Muchas de las actividades programadas se encaminaron a reflejar la historia, costumbres y, en general, el modo de vida y de trabajo de los residentes en este municipio cubano.

Dentro de todo ese accionar se encontró la presencia y participación de la comunidad de haitianos y sus descendientes que viven en las distintas comunidades de Santa Cruz del Sur.

La presencia de la etnia haitiana en este territorio se origina, fundamentalmente, con la llegada a él en las primeras décadas del siglo XX, de los inmigrantes venidos de Haití hacia Cuba en búsqueda de mejoría económica. Los campos de la caña de azúcar camagueyanos, y esencialmente, los santacruceños, recibieron el esfuerzo, sudor y hasta la sangre de los braceros haitianos utilizados para el corte en condiciones depauperantes.

Algunos sufrieron de la repatriación forzosa implantada por las autoridades cubanas en la década de 1930, pero un número no despreciable de ellos se asentó en diversos lugares del país, en especial, en la región oriental.

LA COMUNIDAD HAITIANA EN SANTA CRUZ DEL SUR

Un grupo de intercambios con representantes de la comunidad haitiana del municipio Santa Cruz del Sur se propició como parte de la Semana de la Cultura en el municipio.

En cada lugar se desarrolló, como temas:

1.- El Proyecto cultural de la comunidad haitiana en Cuba
a.- El reconocimiento de la pertenencia a esta etnia y el realce de la autoestima de los haitianos y sus descendientes en Cuba.
b.- El rescate y conservación del creole, como lengua materna.
c.- La preservación de los hábitos, costumbres y tradiciones haitianas de nuestros ancestros.
d.- El mantenimiento de los valores culturales haitianos, sus cantos, su música y su cultura danzaria.
e.- Mantener la cultura culinaria haitiana.
f.- Conservar el acervo cultural de los remedios y medicina natural haitiana.
g.- Destacar la presencia y participación del haitiano en la historia cubana, los héroes y mártires de esta etnia en los procesos revolucionarios y luchas
sociales cubanos.

2.- La incorporación a la Asociación del Caribe, paso actual como reconocimiento
jurídico a nuestra Asociación de Residentes y Descendientes de Haitianos en
Cuba.

3.- El Censo de El haitiano en Cuba. Características e importancia para todo lo anterior. El conocimiento sobre los oficios y profesiones de los descendientes de haitianos con vista a la colaboración con el pueblo haitiano

Los encuentros fueron los siguientes:

MARTES 18-3-2008

Este día inició el ciclo de intercambios con la comunidad haitiana del municipio Santa Cruz del Sur. El primero de ello ocurrió en el central Haití (antiguo ________).

Representantes de la comunidad haitiana, encabezados por MAXIMO TERRY, y otros integrantes del central depositaron una ofrenda floral ante el busto erigido en el parque del batey a Jean Jacques Dessalines.

Este es el único monumento erigido a Dessalines que se conoce en Cuba. Los descendientes de haitianos y otros ciudadanos del central cuidan de la limpieza y mantenimiento del busto.

Cada año se le rinde tributo a la Revolución haitiana ante el monumento a Dessalines en fechas significativas para la historia de ese pueblo.

En el momento de la visita se coincidió con PABLO PERIBAÑEZ, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Santa Cruz del Sur, quien realizaba un intercambio con autoridades de la Salud en ocasión de la próxima inauguración de la restaurada policlínica del central.

Varios trabajadores aprovecharon nuestra presencia para tomar fotos. En la primera gráfica estuvieron: LEMER ALBA MIRANDA (médico),MIREYA MONDE ENRIQUE, MAXIMO TERRY, BEBO, FRANCISCO RAMOS, DIDIER TAMAYO, YODILIS HIDALGO y KATHERINE ALVAREZ.

En la segunda foto intervinieron: ALGIDES ARENCIBIA, ONUPI FORRESTIA, PABLO PERIBAÑEZ, GENOVEVO PEREZ, SIBELYS DESIDOR, FRANCISCO RAMOS, MAXIMO TERRY, ANDRES LORENZO y LEMES ALBA.

En la tercera gráfica estuvieron MAXIMO TERRY y MARBELIS MARTINEZ.

Terminadas la ceremonia y toma de fotos nos dirigimos hacia la casa de Máximo Ferry. A pocos metros de la entrada esperaban, portando las banderas cubana y haitiana, un numeroso grupo de haitianos y descendientes de haitiano que, de inmediato, comenzaron a entonar himnos y canciones en creole de bienvenida.

A partir de ese momento se realizaron las interpretaciones de músicas y cantos del rara haitiano y dedicados a los loas. En todo momento, Maximo Ferry dirigió las acciones en el patio delantero, en la pieza bajo techo de guano y en su retirado cuarto de conservación de los íconos y demás figuras y objetos religiosos.

Se intercambió sobre la dedicación de este hombre a hacer el bien, con los conocimientos y prácticas religiosas. Varias mujeres atestiguaron lo logrado en la cura de sus familiares (hijos, hermanos y otros), quienes en su atención médica no se les daba muchas esperanzas, y de cómo se mejoraron y curaron a partir de lo realizado por Maximo.

En su altar se conserva una foto del haitiano JOSE MARTINEZ POLICIS (GABELIS), quien llegó a Cuba muy joven. Fue acogido por José Alfonso Haití y por Ana Joseph Layout. Policis comenzó a practicar sus dotes espirituales y religiosas y alcanzó una fama extraordinaria, ayudado por Andrea, Carmita, Tufí y Porfirio. Falleció a los 98 años y tuvo siete hijos, seis de ellos viven aún, uno en la comunidad La Jagua y el resto en las provincias de Camaguey y La Habana.

Presente estuvo VICTOR RAMOS POL (VICTOR GAMOS POL), haitiano llegado a Cuba a el mismo día de su cumpleaños, el 9 de agosto de 1952, con la intención de trabajar seis meses, en la antigua provincia de Oriente, y regresar a Haití, cosa que no ha logrado aún. Vive en la comunidad Cupertinas.

Máximo entregó una figura tallada en madera que reproduce la figura de un hombre tocando un tambor.

Es una obra del descendiente de haitianos OVIDIO ROLANDO MARSHALL ANDRES, nacido el 5 de julio de 1969 en el central Haití. Hijo de Jaime Marshall Andrés y de Martha. Reside en Caparró y desde sus primeros años de vida sintió inclinación hacia la creación y talla de figuras en madera.

Entonces creaba amuletos, collares, pulsos y les grababa textos o nombres.

En su adolescencia se inclinó también hacia el trabajo en piedras. En el año 1983 y siguientes creó figuras ornamentales y decorativas con este material

Pero la madera era su gran motivación. Así a partir del año 1990 confeccionó imágenes religiosas de Santa Bárbara, Yemayá, Oshún, San Lázaro, la Virgen de la Caridad del Cobre, entre otros.

Fue llamado al Servicio Militar Obligatorio y, tras el cumplimiento de esta etapa se dedicó a perfeccionar su trabajo en la talla en madera.

Ahora confeccionaba figuras relacionadas con sus ancestros y de la cultura haitiana, pero también de indios, cimarrones, africanos y negras pregoneras.

Ovidio siente que todo lo que le rodea le transmite un mensaje de inspiración. Por eso ahora sus creaciones tiene que ver con la belleza de la vida y, como afirma, hasta la propia madera que ha de emplear le comunica qué es lo que debe tallar en ella.

El siguiente lugar fue la casa de ANA JOSHEP LAYOUT (ANITA). Los hijos y nietos nos explicaron el estado deplorable en que se encuentra el hogar, a partir de los daños de ciclones y otros fenómenos. También informaron acerca de las gestiones, infructuosas hasta ahora, con las autoridades del municipio para lograr la reparación necesaria.

La vivienda, con más de 60 años de existencia, es de madera y tiene derrumbada al menos una de sus paredes de madera y descubierta varias porciones de su techo de guano.

Según explicaciones de los familiares, cuando llueve hay que estar mudando camas y muebles de un lugar para otro por las goteras.

Desarrollamos una conversación con Ana, para conocer sus recuerdos de cuando joven, los nacimientos a los que asistió como partera, los dulces y otros alimentos que elaboraba y vendía en los cañaverales entre las dotaciones de braceros haitianos y jamaicanos, así como sus amoríos, de los cuales le nacieron ___ hijos.

El Monumento a los Mártires de Pino 3 fue el siguiente punto del recorrido, lugar en que se conocieron los pasos de la Dirección del Museo y de las autoridades del municipio Santa Cruz del Sur de cara al próximo aniversario del acontecimiento al cual está erigido.

Un emotivo intercambio se realizó en el hogar del haitiano FRANCISCO FLORES FLORES, quien cumple el 12 de abril los cien años de edad. Sus hijas, nietos y demás componentes de su núcleo familiar expresaron su alegría por contar con un hombre de la talla de Francisco.

Para mostrar su buen estado de salud los presentes encendieron una grabadora y reprodujeron en ella una pieza musical de reggaeton. Francisco, sin mediar mucho tiempo, se paró del sillón en que estaba sentado y comenzó a danzar. Así estuvo buen rato hasta que, preocupados por que se fatigara demasiado, pedimos que interrumpieran la música.

Francisco protestó:

“¿Quién quitó la música?”

Y siguió bailando como si nada le agotara al encenderse de nuevo la grabadora.

Se le tomaron varias fotos con su familia así como se le filmó en video mientras bailaba dentro de su hogar.

La jornada concluyó con el encuentro, breve por lo avanzado de la hora, en casa de CLOTED DENIS (FIFINA), en el Batey de Pino 2, en el propio central Haití, Santa Cruz del Sur, Camaguey. La madre de ella nació en Tobek y se crió en Les Cayes, y su padre nació en Port Salut, ambos haitianos.

Ella y su esposo se deshicieron en atenciones para los visitantes. El tiempo alcanzó tan sólo para la toma de algunas fotos, la filmación corta en video y el compromiso de regresar el 22 de agosto para, al día siguiente, estar presentes en los festejos por su cumpleaños y las ceremonias que les realiza a sus loas.

MIERCOLES 19-3-2008

Correspondió el encuentro con los de la comunidad haitiana en el central Cándido González. Se reunieron 94 personas (se adjunta la relación). Se habló de lo que la comunidad haitiana está haciendo en estos tiempos. Varios de los asistentes contaron sus experiencias personales y sus sentimientos de pertenencia a la comunidad.

Varios descendientes tocaron música folklórica haitiana y se entonaron cantos del país de sus ancestros.

Se tomaron fotos y filmaron videos de todo ello, además de grabar las palabras de los participantes.

Especial toma gráfica se hizo con LUIS VANTES BERNAL (de 81 años de edad) quien tiene16 hijos, 13 nietos, 29 biznietos y 27 tataranietos (se adjunta relación de sus descendientes).

Concluida la actividad se visitó la casa del haitiano centenario JOSE SUAREZ MESILLE. Ese día la persona a su cargo no estaba, por lo que no se pudo adelantar en los datos y otros controles sobre él. Está ciego y depauperado. Lo mantienen sin ropa en un camastro.

MARCELLINA TERESA DARROMAN BATISTA es descendiente de haitianos residente en calle Tercera número 16, en el central Cándido González, con los teléfonos (032) 32-3573 en su trabajo, la escuela Ignacio agramante, y el (032) 32-8390, su vecina María Calderón. Ella es defectóloga y como investigadora lleva el tema de La solidaridad presente como valor en la Edad de Oro. Tiene como propósito iniciar otra investigación, esta vez sobre las expresiones del valor de la solidaridad haitiana, para lo cual se plantea desarrollarlo desde el ejemplo del cacique Hatuey y los nexos de los revolucionarios haitianos con Bolívar, Miranda, Aponte, enla gesta cubana y hasta nuestros días.

Refiere algunos datos sobre sus antepasados: Su abuelo materno se llamó Salomón Batista y falleció en 1950. Su abuela materna se llamó Esperanza Julio y falleció en 1996. Ellos llegaron a Cuba por el Sur de la antigua provincia de Oriente y se asentaron por el río Cauto alrededor del año 1920. Su bisabuela paterna se llamó Francisca y procedía de Haití. Su abuelo paterno procedía de Africa y era congo mandinga. Se asentaron por Alto Songo. Su abuelo paterno, de apellido Montes de Oca y también por Alto Songo, tuvo 56 hijos con 13 mujeres. Participó en la llamada Chambelona. Su abuela paterna se llamó Marcelina Darroman Glaciar. Su padre se llamó Félix Celestino Darroman y murió a los 95 años. Su mamá, Teresa Batista Julio, nació en Santa Cruz del Sur en 1933 y era la cuarta hija de los abuelos.

JUEVES 20-3-2008

La Caobita fue el lugar seleccionado para esta jornada.

En el local social dedicado a la televisión y otras actividades se proyectó el video filmado al grupo folklórico Ocay, de este lugar.

El grupo se constituyó en el año 1981y su actual director es DIOSARIO RIVERON DIAZ.

Lo integran 26 mujeres y hombres descendientes de haitianos residentes en La Caobita, que han participado en festivales, tanto municipal como provincial,

Ellos interpretan música de sus ancestros en el idioma materno, el creole, y ejecutan bailes típicos. Vodú, Mazún, Merengue, Congó y otros forman parte de su repertorio.

Un interesante intercambio de impresiones se efectuó este día. Los componentes del grupo Ocay expresaron las dificultades por las que atraviesan para mantener y desarrollar sus actividades: la falta de instrumentos musicales –tambores, esencialmente-, no disponer de un local apropiado para sus ensayos, el no acceso a presentaciones del grupo más allá de las fronteras del municipio o de la provincia de Camaguey, la falta de sistemático asesoriamiento coreográfico, entre otros problemas.

Manifestaron su respaldo a la Revolución, por lo cual enviaron un saludo y felicitación al General de Ejército Raúl Castro Ruz, a la vez que expresaron sus deseos por el pronto restablecimiento de Fidel.

Se le orientó a la dirección del grupo que trabajara en la creación de un expediente artístico que le permitiera presentarlo en lugar apropiado con la argumentación suficiente para el reconocimiento de ellos como un grupo Portador de la cultura haitiana.

Varias mujeres (SANTA BERNAL –TUTA-, CARMEN AMALIS GARCIA, ROSA TERRY, JUANA MARTINEZ y EULOGIA ALVAREZ RUIZ) prepararon una muestra de dulces y comidas típicas haitianas: bombon, coco en lonjas, ton ton, dulce de maní, calalú, congrí con frijol Caballero, verdolaga, col, -chu cocinada-, col fresca, chimi mays, además de varias bebidas: liqué, refresco, aguardiente.

El intercambio cerró con música y cantos interpretados por integrantes del grupo.

VIERNES 21-3-2008

Luego de varias horas de espera, un conjunto de residentes de La Jagua, entre descendientes de jamaicanos y haitianos, intercambiaron con los visitantes de La Habana y del propio municipio Santa Cruz del Sur.

La docena de descendientes de ambas etnias (ver relación adjunta) expresaron sus vivencias como tales, las enseñanzas de sus padres, las costumbres, los mitos y demás recuerdos de sus ancestros.

Fueron fotografiados y filmados en video así como fotocopiados algunos documentos de sus padres y familiares que mostraron a los visitantes.

SABADO 22-3-2008

Este se realizó un encuentro general de la comunidad haitiana de Santa Cruz del Sur en la Casa de los Combatientes, en la cabecera municipal.

Asistieron de las distintas zonas de asentamientos de haitianos y sus descendientes y se efectuó la degustación de dulces y comidas típicas haitianas:

- cogri pu rus o congrí de frijoles colorados con maní
- dus soray o dulce de casco de naranja
- pe mai ac coc o pan de maíz con coco
- dus pstach a gre o dulce de mani en grano
- dus bombo o bombón haitiano
- berejen ac bian cocho o berenjena con carne de puerco
- tom tom o fufú de viandas
- calalú ac vian cocho o quimbombó con carne de puerco
- dus pistach mule o dulce de maní molido con azúcar parda
- sam sama c pistach o pinol con maní
- dus coca c sic bla o dulce de coco con azúcar blanca
-dus coc lonj o dulce de coco en lonjas
- pe patata c coc o pudín de boniato con coco
- cogrí puat chus o congrí de frijol Caballero
- dus coca c sic mué o dulce de coco con azúcar parda o prieta
- cogrí pistach o congrí de maní
- cogrí puat congo o congrí de frijol gandul
- coc a loj o coco en lonjas
- liqueur o licor haitiano

Un jurado determinó los mejores, y se entregaron reconocimientos a los ganadores.

Los grupos folklóricos haitianos cantaron y bailaron en la tarde de este sábado.

Momento especial lo constituyó la presentación del libro De dónde son los cubanos, con la presencia de Raimundo Gómez Navia, uno de sus cuatro autores.

EL CENSO DE EL HAITIANO EN CUBA

Itelia, la mamá de Sibelys Desidor, facilitó los listados que tenían confeccionados sobre los integrantes de la comunidad haitiana en el municipio Santa Cruz del Sur, previo a la labor del Censo de El haitiano en Cuba que acometerán.

Recibieron en esta oportunidad el grupo de planillas del Censo para esta acción. Ellos reproducirán las planillas de acuerdo a su necesidad.

Según el listado que entregaron, en los sitios donde hicieron el control hay 713 haitianos y descendientes:
Cant. Por ciento
Haitianos autóctonos 2 0,2%
Hijos de haitianos 130 14,2%
Nietos de haitianos 225 24,6%
Biznietos de haitianos 213 23,3%
Tataranietos de haitianos 66 7,2%
Chosnos 2 0,2%
Sin especificar parentesco 277 30,3%
Total 915 100%

Les falta controlar parte del municipio cabecera y una o dos zonas mas.

LOS HAITIANOS CENTENARIOS

Según Sibelys los haitianos centenarios que quedan en Sant Cruz del Sur son:

JOSE SUAREZ MESILLE. Nació el 12 de abril de 1902. Cumple 106 años. Vive en Cayo Confite número 2, Central Cándido González. Está muy delicado de salud.

FRANCISCO FLORES FLORES. Carne de identidad de Extranjería: 08041102928, Hijo de Federico y de Emilia, haitianos, Vive en: Batey Pino 3 s/n, central Haití, Santa Cruz del Sur, Camaguey. Cumplió los 100 años de edad el 12 de abril del 2008. Vive al lado del monumento a los Mártires de Pino 3. Se le fotografió y filmó en video. Bailó al compás de un reggaeton.

ANA JOSHEP LAYOUT (ANITA) Vive en Pueblo Nuevo número 4, Central Haití, Santa Cruz del Sur, Camaguey. Según sus documentos de Extranjería tiene 96 años. Pero los testimonios de quienes la conocen atestiguan que posee más edad. Uno de ellos, Guillermo Díaz, afirma que su madre, de 86 años, le comunicó que fue amamantada por ANA, y ello no es posible con sólo diez años de diferencia de edad. Por lo tanto, ella debe estar entre los 110 y 115 años. Se le tomaron fotografías y se le filmó en video.

Ana llegó a Cuba a la edad de 12 años. Se dedicó a trabajar haciendo pan y dulces para vender.

Fungía como la partera en el poblado del central y sus alrededores. También amamantó a niñas y niños cuyas madres no podían hacerlo.

Cooperó con la Revolución de distintas maneras en tiempo de la insurrección.

Ahora dispone de una chequera de Seguridad Social con 164 pesos mensuales.

El haitiano de apellido SANCHEZ LORA Tiene 98 años. Reside en el Hogar de Ancianos, donde no se logró después de varias gestiones porque no se tenía la autorizaciócorrespondiente para ello. Está ciego.

domingo, abril 20, 2008

PASOS ORGANIZATIVOS DE LA COMUNIDAD HAITIANA EN CUBA

Desde mediados del año 2007 los haitianos y sus descendientes en Cuba realizan las coordinaciones pertinentes para sumarse a la Asociación del Caribe como su organización oficial y reconocimiento legal.

Así se ha decidido para todos los integrantes de la comunidad haitiana en Cuba.

La historia de esta etnia en la Mayor de las Antillas data desde prácticamente la formación del país, incluso desde antes de la llegada europeos al Nuevo Mundo, denominado por algunos como el “descubrimiento”, ya que los nativos originarios de Haití, como le llamaron en lengua araucana al “país de altas montañas”, habían emigrado y asentado en Cuba.

Los colonialistas españoles se encargaron de arrasar con los aborígenes, tanto allí, en la isla llamada por ellos como La Española, como en Cuba, todo por el afán de riquezas a extraer en ambos territorios.

Importaron a los negros africanos en uno y otro lugares, dando comienzo a esa negra etapa de la historia de conquista y colonización en América, la esclavitud, durante la cual miles, millones de hombres y mujeres del continente africano perdieron la vida, entregaron su sangre y sufrieron de tanto atropello.

Haití fue ocupada poco a poco de otros elementos europeos, predominando los franceses, los cuales, mediante tratado de su país con España, se adueñaron de esta región.

Se formó en Haití, como parte de todo este proceso, una nueva comunidad, predominantemente francesa y africana, originaria del franco-haitiano.

La Revolución triunfante de los esclavos, en el periodo de 1790 a 1804, originó el éxodo hacia Cuba y hacia otras partes del continente americano de centenares y miles de franceses propiamente y de los franco-haitianos, formando así la segunda emigración hacia la Mayor de las Antillas desde Haití.

La llegada, asentamiento y participación en todos los aspectos de la vida en Cuba, fue dándole un fuerte vínculo al elemento haitiano-cubano.

Un siglo más tarde, con el papel preponderante del naciente imperio norteamericano en Cuba, se produciría la tercera y mayor de las oleadas de inmigrantes procedentes de Haití. Empresas y magnates azucareros norteamericanos, cubanos y otros produjeron la entrada masiva en la Isla de otro manera de esclavitud: los braceros antillanos, mayoritariamente haitianos, para el corte de la caña de azúcar en los campos cubanos.

Así no menos de medio millón de haitianos fueron trasladados a Cuba como fuerza de trabajo barata y sometidos a todo tipo de explotación.

La historia escrita por los burgueses nacionales y extranjeros no recoge en toda su dimensión el horrendo pasaje de explotación, vejámenes y discriminación a que estuvo sometido esta etnia durante las seis largas décadas de presencia suya en la denominada República de Cuba.

No obstante, en cada momento el oriundo de Haití supo enfrentar la situación en Cuba y participar heroicamente en todos los procesos sociales y de liberación popular. Así lo marcan los ejemplos del Cacique Hatuey, en tiempos de la conquista y colonización, las dotaciones o individualmente de esclavos haitianos incorporados a las tropas insurrectas o mambisas durante las Guerras de Independencia cubana, los trabajadores y dirigentes sindicales haitianos en las luchas obreras, y los combatientes haitianos y sus descendientes participantes en el Ejército Rebelde en la última etapa de la liberación cubana en la década de 1950.

Haití, para entonces, estaba sometida a la sangrienta dictadura de Francoise Duvalier, lo que originaba el éxodo de miles de personas hacia diversos países, Cuba entre ellos, con lo que se efectuó una cuarta forma de emigración de haitianos hacia la Mayor de las Antillas: por motivos políticos.

Con el advenimiento de la Revolución Cubana el primero de enero de 1959 se propició por los componentes revolucionarios y progresistas de los haitianos y sus descendientes radicados en Cuba la creación de una Asociación que les agrupara y les facilitara el intercambio entre sus coterráneos.

Así, a principios de los años de 1960 se constituyó una Asociación de Residentes Haitianos, a cuyo frente estuvieron destacadas personalidades residentes en Cuba.

Sus primeras acciones estuvieron encaminadas a la aglutinación de los elementos progresistas que luchaban contra Duvalier, tanto los que consideraban como necesario desarrollar el enfrentamiento armado como los que propugnaban otros métodos de enfrentamiento a la dictadura.

Durante varios años se mantuvo funcionando esta Asociación hasta caer en un impass, en correspondencia con las personas que asumían o no su dirección.

A la altura de febrero de 1991, y paradójicamente cuando el país entraba en un proceso de depauperación de las condiciones económicas, política y sociales, llamado Período Especial, originado por la caída de la Unión Soviética y demás países del campo socialista de Europa, se efectuó una nueva revitalización de la Asociación, asumida esencialmente por descendientes haitianos nacidos en Cuba, y cuyo eje inicial se desenvolvió en la capital del país y después se extendió al resto de las provincias, esencialmente, en la región oriental.

Las acciones desarrollada por el conjunto de dirigentes y activistas de la Asociación en esa etapa fue la de rescatar la autoestima entre los descendientes haitianos, lograr que los propios miembros de esta etnia realizaran el reconocimiento público de ellos como descendientes de haitianos y no de “franceses”, o la negación de su condición como muchos acostumbraban a declarar.

Muchas décadas de discriminación y explotación sufridas en la llamada República hasta el 1959 hacían aparecer al haitiano y a sus descendientes como la última de las categorías sociales, económicas y de toda naturaleza en Cuba.

El haitiano y sus descendientes eran discriminados no sólo por su condición de pobre, como una de las únicas etnias en Cuba que no contaba con medios de producción propios, recursos naturales u otros objetos de riqueza material, sino también por ser extranjero y no dominar bien la lengua española.

Los discriminaban los cubanos blancos y de otra pigmentación de la piel pero, peor aún, los discriminaban por los propios negros cubanos que preferían ver muertas a sus hijas antes que casadas o en relaciones amorosas con un haitiano o sus descendientes.

En número reducido acudían a las escuelas los niños y, sobre todo, las niñas, descendientes de haitiano, y eran objeto de burlas por su manera de vestir, de peinar o de hablar el español. Despectivamente se les llamaba “pichón de haitiano”.

El creole, la lengua materna de sus padres, era hablado por ellos a lo interno de sus hogares y no en público, para tratar de esconder su origen haitiano.

Por tales circunstancias, a pesar de la acción liberadora de la sociedad originado por la Revolución Cubana, treinta años después de aquel Primero de Enero aún subsistían en las mentes y en las vidas de numerosos descendientes de haitianos los rezagos discriminatorios de épocas pasadas, y preferían ocultar o no exponer en público su ascendencia haitiana.

El Grupo Gestor de la Asociación de Residentes y Descendientes Haitianos en Cuba (ARDHC) se dio a la paciente tarea de contrarrestar estos prejuicios y atraer hacia su seno a los haitianos y sus descendientes en el país.

La labor consecuente, diaria y sistemática de ellos, junto al cada vez mayor panorama de rescate cultural que propiciaban las instituciones del país, fueron calando en una cada vez mayor número de personas que se sumaron al propósito de llegar a tener una Asociación propia de haitianos y sus descendientes, por demás una de las pocas, sino la única agrupación en Cuba de una etnia mayoritariamente de pigmentación de la piel negra.

El 10 de febrero de 1991 tuvo su fecha de reactivación como una agrupación sociocultural y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) fungió como el órgano de relación., y en todo instante brindó una esmerada atención y apoyo a los propósitos de la Asociación.

Además de la labor proselitista entre los haitianos y sus descendientes en el país, el Comité Gestor inició un grupo de actividades propias sobre la cultura haitiana, tal y cuales fueron una conferencia del escritor y director de cine Rassoul Labuchin sobre Haití su economía y desarrollo social, la primera, y un encuentro con los periodistas y otras personas que concurrieron a la toma de posesión del presidente Jean Bertrand Aristide.

Desde un primer momento se fijó el rescate de las tradiciones históricas de Haití, sus costumbres y su folklore, el empleo del creole y otras tradiciones.

Las “Tardes haitianas” se convirtieron en un medio para el intercambio informativo y cultural de esta comunidad, a la vez que se desarrolló una sistemática atención a la familia de los fallecidos y otras acciones sociales.

Se conmemoran y celebraron las efemérides haitianas y se abrieron aulas para la enseñanza del creole.

El reencuentro familiar es una de las líneas de trabajo del Asociación.

Un ejemplo de participación activa respecto a los problemas concretos del país fue la constitución y resultados de una Brigada de Trabajo Voluntario de sus asociados y de haitianos estudiantes en Cuba o refugiados que, por espacio de 15 días en dos años consecutivos participaron en áreas agrícolas en apoyo al Programa Alimentario. La Brigada se denominó Emilio Bárcena Pier, en homenaje al descendiente de haitianos participante en la guerra de liberación revolucionaria y caído en combate.

Otra evidencia lo fue la constitución de la primera cooperativa agropecuaria haitiana en Cuba, en el municipio de Florida, provincia de Camaguey, una parte de cuya producción se destinó al apoyo alimentario de Círculos Infantiles y Hogares de Ancianos de aquel territorio.

También miembros de la Asociación contribuyeron con su labor voluntaria en la construcción de la Villa Panamericana, al este de la capital.

Como parte de la labor de la Asociación estuvieron las acciones realizadas por la comunidad con los refugiados haitianos llegados a Cuba.

En la medida en que se fue fortaleciendo como organización, y que sus actividades fueron cada vez más difundidas y trascendidos sus contenidos, se propició un movimiento de identificación y acercamiento a la Asociación de haitianos residentes y sus descendientes en Cuba.

Sus filas se incrementaron tanto en Ciudad de La Habana como en las otras provincias, lo que originó la necesidad de estructurar el Comité Gestor en filiales. Así se crearon las filiales de Matanzas, Florida, Morón Ciego de Avila, Camaguey, Esmeralda, Santiago de Cuba y Guantánamo, como las primeras, y propugnándose la constitución en otros lugares como Amancio Rodríguez, Las Tunas, Holguín, etc.

Con el incremento del turismo en Cuba se originó igualmente una arribazón mayor de ciudadanos haitianos residentes en Estados Unidos, Canadá, Francia y en otros lugares, los que se comunicaron con la comunidad en el país y fueron atendidos por ésta.

También se propició el intercambio de la Asociación con comunidades haitianas residentes en otros países.

La comunidad ha promocionado la creación y apoyado la constitución de grupos folklóricos de descendientes de haitianos en Cuba, tanto en la capital como en el resto del país.

El Gobierno de la capital le entregó un local al Comité Gestor para que se reparara y convirtiera en la futura Casa de la Cultura Haitiana en Cuba, a la vez que sede de la Asociación de Residentes Haitianos y sus Descendientes.

Fueron invitados oficialmente directivos del Comité Gestor y por primera vezen 1995 una delegación de la comunidad haitiana en Cuba visitó Haití. También se produjeron visitas a Canadá.

Desde el 1994 el Comité Gestor inició los pasos para la inscripción oficial de la Asociación en los órganos de justicia del país. Hasta ese entonces primaba el criterio en el ICAP de que, como este organismo era el órgano de relación de la Asociación, no se necesitaba una inscripción oficial ante el Ministerio de Justicia.

Se elaboraron los proyectos de Estatutos, Reglamentos y demás documentos solicitados para la inscripción como Asociación y e presentaron ante el Ministerio de Justicia.

El Comité Gestor y la comunidad en su conjunto organizaron y desarrollaron en la capital el Primera, Segunda y Tercera Semanas de la Cultura Haitiana en Cuba, durante los años 1993 (del 3 al 9 de enero), en 1994 ((primera quincena de enero), y en 1995 (25 de junio al 2 de julio), en los que participaron numerosos grupos folkóricos del país portadores de la cultura haitiana, así como artistas haitianos de Estados Unidos y Canadá que actuaron durante ambas semanas de festejos.

La Asociación, que hasta diciembre de 1995 se denominó Asociación de Residentes y Descendientes de Haitianos en Cuba (ARDHC) pasa a llamarse en lo adelante como Asociación de Haitianos y sus Descendientes en Cuba (ADHC), según se acordó en el Primer Encuentro de la Asociación con sus filiales en las provincias.

El Día Internacional del Creole, instituido en 1979 en las Isla Seychelles, y que se festeja anualmente en todas las regiones del mundo donde se habla este idioma, se celebró por primera vez en Cuba por la Asociación el 29 de octubre de 1996 en el ICAP, como parte de las actividades por el Día de la Cultura Cubana (20 de octubre).

En el año 1997 el Comité Gestor recibe la orientación de que por decisión oficial del país, hasta tanto no estuviera inscrita en el Registro de Asociaciones, del Ministerio de Justicia, no estaba autorizado a realizarse más actividades de la comunidad haitiana como tal.

Tal y como hasta el momento venía ocurriendo, el Comité Gestor fue fiel celador de la Legalidad Socialista y suspendió, desde entonces, toda actividad oficial como Asociación.

Parejamente dio los pasos para que se acelerara lo que ya hacía un tiempo largo había presentado ante las autoridades correspondientes: la solicitud de inscripción ante el ICAP, como Organo de Relación, y el Ministerio de Justicia.

Vendría, al año siguiente, una etapa fatídica en el Comité Gestor, en la Asociación y en la comunidad haitiana en Cuba.

El principal directivo del Comité Gestor se apareció con la propuesta de crear otra asociación con destino al seguimiento del creole en el país, con la participación exclusiva de personas de estudios superiores.

Esta idea fue rebatida y considerada una locura, por cuanto esta lengua en Cuba era practicada sólo por los haitianos y sus descendientes, de los cuales la inmensa mayoría de los autóctonos eran iletrados o de muy bajo nivel escolar y, lo más importante de todo, que ya la propia Asociación de Haitianos y sus Descendientes en Cuba (ADHC),
no solamente tenía entre sus objetivos la promoción del creole en el país, sino que era parte intrínseca de su contenido como organización. Que la idea propuesta generaría la división en la comunidad haitiana.

Las desavenencias originadas desembocaron en un agrio intercambio de acusaciones y refutaciones por parte del principal directivo del Comité Gestor y un grupo de seguidores contra el resto de sus integrantes, y una acción recíproca de estos contra aquel.

Se decidió suspender al individuo que ostentaba el cargo de Presidente y nombrar sucesivamente a otras personas que desempeñaran esas funciones.

Lo peor de todo es que, por una actitud inadecuada del antiguo Presidente, este problema trascendió y fue mostrado por él en un intercambio que provocó con el recién electo Presidente de Haití, Rene Preval, en la sede de la Embajada de ese país en Cuba.

Toda esta situación generó, como se había advertido, una frustrante división entre la comunidad haitiana en el país, y en su seno comenzaron a surgir iniciativas de creación de la Asociación distinta a la original, con sede en Guantánamo, Camaguey u otros lugares.

El Comité Gestor continuó, en todos estos años transcurrido hasta la fecha, propiciando la elevación de la autoestima entre los haitianos y sus descendientes en Cuba, estimulando el rescate y desarrollo de la cultura haitiana en el país, atendiendo el reencuentro familiar, promoviendo líneas de acción solidaria y proyectos de colaboración con el pueblo haitiano, y gestionando la unidad en el seno de la comunidad haitiana –incluso, con aquellos que tomaron otro derrotero y fomentaron la división-.

La Dirección del país decidió no autorizar el reconocimiento de más organizaciones no gubernamentales en el país y, como parte de ello, fortalecer la agrupación en la Asociación del Caribe de todos aquellos oriundos o descendientes de las islas y zonas de esta región.

Hasta este momento y durante los últimos diecisiete años, los inmigrantes haitianos y sus descendientes nacidos en Cuba habían laborado para crear una Asociación propia.
Asociación de Haitianos y sus Descendientes en Cuba (ADHC),

El Comité Gestor de la Asociación de Haitianos y sus Descendientes en Cuba (ADHC),
fiel a sus votos por la Revolución Cubana, acata esta decisión y estimula a sus integrantes y a la comunidad haitiana en el país a inscribirse en la sede central y filiales de la Asociación del Caribe, proceso que se desarrollará paulatinamente durante el presente año 2008.
MIEMBROS DEL CONSEJO DE ESTADO ELEGIDO EL 24 DE FEBRERO DEL 2008

El 24 de febrero de 2008 culminó el proceso eleccionario en Cuba con la composición del Consejo de Estado.

Entro de los diputados electos a este órgano se encuentra varios descendientes de haitianos (mujeres y hombres) elegidos desde el barrio por los vecinos de sus cricunscripciones.

Asi se muestra, una vez más, el nivel de reconocimiento alcanzado por los componentes de esta etnia dentro de la actualidad cubana.

He auí los miembros del Consejo de Estado electo:

DIPUTADO
CARGO NOMBRE Y APELLIDOS POR
PRESIDENTE Castro Ruz, Raúl II Frente
PRIMER VICEPRESIDENTE Machado Ventura, Jose Ramón Guantánamo
VICEPRESIDENTE Almeida Bosque, Juan S. de Cuba
VICEPRESIDENTE Colomé Ibarra, Abelardo Contramaestre
VICEPRESIDENTE Lage Dávila, Carlos Aurelio Plaza
VICEPRESIDENTE Lazo Hernández, Juan Esteban A. Naranjo
VICEPRESIDENTE Casas Regueiro, Julio Encrucijada
SECRETARIO Miyar Barrueco, José Miguel 10 de Octubre
DEMAS MIEMBROS
Balaguer Cabrera, José Ramón S. de Cuba
Betancourt Téllez, Iris Manzanillo
Fernández Retamar, Roberto Playa
Herrera Martínez Luis S
Saturnino Santa Clara
Lugo Fonte, Orlando G. de Melena
Pérez Roque, Felipe Ramón A. Naranjo
Sáez Montejo, Pedro Playa
Valdés Menéndez, Ramiro Artemisa
Soberón Valdés, Francisco S. Spíritus
Valenciaga Díaz, Carlos
Manuel San José
Acosta Brooks, Surina Contramaestre
Armenteros Mesa, Regla DayamíSanta Clara
Cintra Frías, Leopoldo A. Naranjo
Chapman Waugh, Inés María Frank País
Concepción González, María
del Carmen C. del Sur
Ferrer Gómez, María Yolanda Pinar del Río
García FríasGuillermo Pilón
León Silveira, Tania Colón
López Miera, Alvaro Colón
Martínez Ramírez, Julio Chambas
Montano Perdomo, Dignora S. Spíritus
Rabilero Fonseca, Juan José,
Coordinador Nacional de los CDRS. de Cuba
Valdés Mesa, Salvador AntonioS. Cruz del Sur

sábado, abril 19, 2008

CONSTRUYEN RUTA DEL CAFE EN EL ORIENTE CUBANO
JOSÉ ANTONIO TORRES
TOMADO DE GRANMA DIGITAL (HTTP://WWW.GRANMA.CUBAWEB.CU/2008/04/18/NACIONAL/ARTIC08.HTML)
SANTIAGO DE CUBA.— Las ruinas de los antiguos cafetales franco-haitianos enclavados en la Sierra Maestra son enlazados a través del proyecto La Ruta del Café que auspicia la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en países donde el florecimiento de este cultivo fue significativo a escala universal.


SEGÚN LAS EXPEDICIONES ARQUEOLÓGICAS EL CAFETAL FRATERNIDAD ES UNO DE LOS MÁS CONSERVADOS.
Se trata de conectar por senderos transitables a 170 de los más 250 cafetales construidos entre finales del siglo XVIII y principios del XIX en el oriente cubano, donde se conservan algunas vías abiertas por colonos y negros esclavos para transportar las producciones en medio de la abrupta topografía del principal macizo montañoso del país.
La obra, que ejecutan los especialistas de la Oficina del Conservador de la Ciudad de Santiago de Cuba y de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Oriente, permitirá divulgar elementos del proceso agroindustrial del café diseñado por los hacendados franceses refugiados en esta región luego de la Revolución Haitiana de 1791, y podrá ser visitada por estudiantes y turistas.
Yaumara López, experta de la oficina del conservador de la Ciudad Héroe, declaró que al igual que los proyectos La Ruta del Esclavo y del Azúcar, el relacionado con el café tiene repercusión cultural pues ahonda en factores étnicos, económicos y sociales ligados a ese proceso migratorio y a las formas y medios que perpetuaron la esclavitud en América.
En la actualidad, dijo, entre 15 y 20 especialistas integran el equipo multidisciplinario que labora en tres rutas fundamentales, destacándose la de El Caney que hasta ahora no había sido estudiada y es donde se encuentran los cafetales más antiguos.
Otras labores y expediciones se llevan a cabo en zonas de Ramón de Las Yaguas, Songo-La Maya y las cercanías de Guantánamo, sitios donde se realizan estudios estructurales y arqueológicos para concluir la ubicación de los inmuebles y solidificar la estructura de algunas ruinas de gran interés patrimonial.
Por sus valores la UNESCO declaró las ruinas de los cafetales franceses de la Gran Piedra, Patrimonio de la Humanidad, en su acepción de paisaje arquitectónico.
Para bien de la historia regional ya se yerguen al igual que el cafetal La Isabelica, uno de los más conservados del continente, otras ruinas e instalaciones que como el cafetal Fraternidad muestran las huellas que marcaron las relaciones económicas y sociales de la cultura americana.